martes, 1 de junio de 2010

La compañia

La compañia
La mejor compañía es uno verdaderamente.

Nadie mejor que uno te acompaña.

A veces anexamos gente por aburrimiento, por experimentación, porque es lo que tiene que ser o por lastima.

A los amigos no.

Los amigos vienen a ser como si uno estuviese con uno.

Los amigos vienen con el amor.

Los amigos lo mismo que el amor no son eternos. No se... si los amigos vienen con amor... entonces si.

La eternidad que se extiende al infinito o a un lugar donde se puede imaginar su fin.

Que contrariedad.

Lo que se ama cambia, progresa, evoluciona, que se yo o a lo mejor es uno el que se altera en cada debacle vital... quien sabe.

La debacle hace que haya que reconfigurar todo lo amado, la forma de mirar lo amado, la vista, el vivo anhelo, fijar el fugaz vuelo inmensamente.

Cada reconfiguración implica... puf... todo lo que implica... mirar de nuevo el sistema operativo, mirar los nuevos iconos, los archivos, un montón de cosas casi iguales pero distintas un toque.

Al final se esta igual pero tal vez un paso mas fluido, mas a tono con las configuraciones ajenas para poder intercambiar bits o lo que quiera que seas.

Reconfigurar, configurar, adaptarse, actualizarse reorganizarse, formatearse, dar un nuevo formato, una nueva cara a la situación.



Ya me voy a mandar... ya lo voy a hacer... todo llega el asunto es bancarse despues que es mas divertido desear que poseer, aunque desear salir de situaciones desagradables si es mas divertido que padecerlas.

(Este blog negro me sale un tanto catartico... que va'se)

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